Un amplio y clarificador panorama de las consecuencias de la era digital (algoritmos, redes sociales, robotización, inteligencia artificial, criptomonedas, medios de comunicación, etc.) en la sociedad actual.
La digitalización se ha impuesto en poco más de dos décadas. Y la ilusión inicial ante ese avance ha ido inclinándose hacia la decepción, hasta agrietar casi todos los consensos sociales y políticos. Internet estaba llamada a ser la herramienta que daría paso a un nuevo mundo más libre, descentralizado y en red, pero ha derivado en el dominio de un puñado de gigantes empresariales.
Las nuevas formas de comunicación no nos han unido, sino que nos acercan demasiado a menudo al tribalismo, a guerras culturales acríticas y a nocivas burbujas ideológicas. Recibimos servicios que creemos gratuitos pero que se basan en la extracción encubierta de nuestros datos. Hemos regalado nuestra intimidad a cambio de entretenimiento y son muchos los que se refugian en sus pantallas para evitar el incómodo roce con el diferente. Ante este horizonte aparentemente deshumanizado, hemos apartado nuestra mirada de los avances científicos que están por llegar.
En La gran fragmentación, Ricardo de Querol lleva a cabo una sagaz reflexión sobre cómo la sociedad contemporánea ha abordado la transformación digital. Sobre cómo reforzar sus extraordinarias ventajas y cómo corregir sus peligrosos inconvenientes. Hemos perdido la fe en el progreso y urge recuperarla.